La Catedral de Segovia ha celebrado con una misa solemne el V Centenario de la colocación de su primera piedra, el 8 de junio de 1525. El 8 de mayo de ese año, el maestro constructor Juan Gil de Hontañón firmó el contrato para iniciar las obras del nuevo templo, ordenado construir por Carlos I tras la destrucción de la vieja catedral durante la guerra de las Comunidades. La nueva catedral estaría dedicada a Nuestra Señora de la Asunción y a San Frutos, patrón éste de la ciudad. 

En el lugar del convento de Santa Clara y buena parte de la aljama judía – se calcula que se desalojaron unas 200 viviendas -, el cántabro Gil de Hontañón colocó la primera piedra en un lugar desacostumbrado para estos edificios, porque comenzó su construcción por ‘los pies’ del templo, cuando lo habitual era iniciar la obra por la cabecera.

Hontañón siguió la escuela de Juan Guas y, mientras se levantaban los primeros muros, se desmontó piedra a piedra el claustro de la catedral vieja, que había quedado indemne al incendio provocado por los soldados realistas, y que ahora es el claustro de la catedral actual, la última catedral gótica de España y una de las últimas de Europa. Por su estilo gótico esbelto, con sus contrafuertes adornados por bellos pináculos, el templo ha recibido el sobrenombre de la 'Dama de las catedrales'. 

Para conmemorar el V Centenario, el Cabildo y el Obispado han organizado un programa de actividades que tuvo sus primeros eventos ya en noviembre del 2024 y que en este año 2025 está ofreciendo muestras culturales y religiosas como la ‘Luna’ expuesta en el trascoro durante febrero, o el cuadro de San Jorge y el dragón, del taller de Rubens, que puede verse en la capilla de la Piedad durante todo este año, y que es la primera vez que se muestra en público.  

Para el día exacto en que se colocó la primera piedra, hace 500 años, la Catedral ha abierto sus puertas para celebrar una misa solemne que ha oficiado el obispo de Segovia, monseñor Jesús Vidal. La misa ha sido acompañada por la música de uno de los órganos del coro del templo, con el organista Santos Merino, y las voces del Chorus Mozarabicus Segoviensis.

En la breve homilía, el obispo Vidal ha destacado la metáfora de cómo una catedral es un "conjunto de piezas y piedras, que todas juntas forman un único templo, una catedral", para compararla con la Iglesia, un conjunto de fieles donde hay múltiples papeles, deberes y devociones, pero todos dirigidos al mismo fin.

A la misa han asistido representantes de las instituciones políticas locales, miembros de la Asociación Frater, que en estos días celebran en Segovia su Asamblea Anual, y numeroso público, además de los espectadores que han seguido la emisión de la misa a través de la retransmisión de la televisión pública española.