La construcción de la nueva Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Toro conllevará una inversión de 440.000 euros. El proyecto ha sido presentado hoy por el alcalde toresano, Tomás del Bien, ante la Diputación Provincial, comprometida a sufragar parte del coste, lo que hará con una aportación de 100.000 euros.

Las nuevas instalaciones persiguen solucionar de madera definitiva los problemas de los elevados niveles de arsénico en la red de abastecimiento de agua potable de la localidad.

Durante la reunión, el vicepresidente tercero de la Diputación de Zamora y diputado de Medio Ambiente y Obras Municipales, Javier Faúndez, transmitió al alcalde de Toro que la institución provincial aportará "de forma inmediata" los 100.000 euros solicitados por el Consistorio toresano para colaborar con el proyecto de construcción de la nueva ETAP, con la que se pretende solucionar los actuales problemas de arsénico en el tercer municipio en importante de la provincia.

El alcalde de Toro expuso durante la reunión la intención de la empresa concesionaria del servicio de aportar 240.000 euros. Los 100.000 restantes para completar el presupuesto los aportará el Ayuntamiento de Toro.

El área de Obras y Medio Ambiente de la Diputación "ha estado con Toro y los toresanos desde el primero momento en que se conoció el problema de potabilidad del agua", tal y como se subraya desde la Diputación, al tiempo que se recuerda la  instalación de tres estaciones de tratamiento de agua portátiles, ubicadas en distintos puntos de la villa para que los vecinos dispusieran de agua potable apta para el consumo.

Una medida por parte de la Diputación Provincial a la que se sumó el envío de un camión de suministro de agua embotellada con 1.000 garrafas de 10 litros cada una en los primeros momentos.

La ayuda económica de la Diputación llega después de que el Ayuntamiento de Toro haya cumplido su "compromiso" de redactar y presentar el proyecto para la construcción de la nueva ETAP, con la finalidad de solucionar de manera definitiva los problemas de abastecimiento de agua potable en la ciudad causados por los elevados niveles de arsénico que arroja la captación actual.