El "deplorable" estado de conservación del Palacio de Bustamante, en Toro, ha llevado a Unión del Pueblo Leonés (UPL) a pedir en las Cortes autonómicas a la Junta que tome cartas en el asunto para frenar su deterioro y evitar la ruina total del edificio, amenazado por posibles nuevos derrumbes. La estructura interior que se mantiene en pie está "seriamente comprometida" y el monumento se encuentra con una estructura metálica en el exterior para evitar el desplome de parte de su fachada sobre la calle.

Este palacio toresano fue construido en el siglo XV y en él llegó a ocupar una estancia Santa Teresa de Jesús, teniéndose constancia de que la villalpandina Inés Gómez lo vendió en 1460 a García Alonso de Ulloa, cuyo mayorazgo fue heredado por Guiomar de Ulloa. "A pesar de su rica historia, este monumento ha sufrido derrumbes parciales en los últimos años, fruto del abandono y dejadez que viene sufriendo", se lamentan desde UPL en Zamora.

Desde el partido leonesista apuntan en su iniciativa parlamentaria que en el año 2020 el Ayuntamiento de Toro abría un expediente por el derrumbe de parte de la estructura, reclamando medidas urgentes para consolidar la estructura de este palacio y evitar nuevos desprendimientos, trasladando entonces además un informe técnico a la Comisión Territorial de Patrimonio de la Junta, en el que señalaba el valor histórico de estancias de este Palacio como el oratorio o habitación que ocupó Santa Teresa de Jesús, si bien la Junta de Castilla y León "no impulsó ninguna acción al respecto".

Los leonesistas recuerdan que, ante el deterioro del oratorio o habitación de Santa Teresa del Palacio de Bustamente, en 2022 el Ayuntamiento de Toro vallaba el entorno de este monumento por el riesgo de desplome hacia la vía pública de parte del mismo, instalando una estructura metálica para evitar el desplome de la fachada y denunciando el peligro de colapso que poseía la zona del oratorio o habitación de Santa Teresa.

Unión del Pueblo Leonés lamenta en su pregunta en las Cortes que ni la propiedad, directamente, ni la Junta, de manera subsidiaria como administración con competencias en materia de patrimonio, tomaron medidas. "Lo que provocó que en octubre de 2022 un nuevo derrumbe destruyese gran parte del oratorio o habitación de Santa Teresa, tras colapsar una pilastra y el muro de tapial que sostenía la estructura de la cubierta".

Así las cosas, advierten a la Junta de que "este derrumbe parcial no será el último si no se actúa, dado el delicado estado de este palacio y sus estructuras tanto interiores como su fachada exterior". Por lo que instan a la Junta a tomar medidas urgentes para remediarlo y salvar esta parte del patrimonio de Toro, que, como apuntan, se ubica en una zona bastante transitada por los toresanos, junto a la plaza Bustamante, en que se sitúan la piscina municipal, el centro de salud, el pabellón deportivo y la sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Toro.