Se enfrentan a penas de prisión de entre 4 y 8 años
La Fiscalía pide más de 25 años de prisión para el matrimonio que encerró a sus hijos en Oviedo
Encerraron a los menores en el interior de la vivienda durante cuatro años y los aislaron de forma absoluta del mundo
El matrimonio que fue detenido el pasado 28 de abril por mantener encerrados a sus tres hijos durante casi cuatro años en su vivienda familiar en las afueras de Oviedo se enfrenta a penas individuales que suman los 25 años y cuatro meses de prisión por violencia psíquica habitual y detención ilegal.
Así se recoge en las conclusiones provisionales que la Fiscalía del Principado de Asturias ha presentado ante el Juzgado de Instrucción número dos de Oviedo, que decretó su ingreso en prisión comunicada y sin fianza dos días después de su detención ante la gravedad de los hechos, publica EFE.
Los progenitores, un alemán de 53 años y una mujer de 48 con doble nacionalidad, alemana y estadounidense, mantuvieron encerrados entre diciembre de 2021 y abril de 2025 a sus hijos, dos gemelos de ocho años y otro niño de diez, que actualmente se encuentran bajo la tutela del Principado, por un miedo infundado a un hipotético contagio.
La Fiscalía acusa a los padres de los delitos de violencia psíquica habitual en el ámbito familiar y de tres delitos de detención ilegal, con el agravante de parentesco, y además de las penas de prisión, solicita medidas como la prohibición de aproximación y comunicación con los menores, y una indemnización de 15.000 euros para cada niño por los daños morales sufridos.
Según el ministerio público, durante todo el tiempo que permanecieron en la casa, los acusados, de común acuerdo, incumplieron los deberes de protección tenían sobre sus hijos y les privaron de sus necesidades educativas, sanitarias, emocionales y sociales.
Así, recoge EFE, encerraron a los menores en el interior de la vivienda y los aislaron de forma absoluta del mundo, "negándoles el contacto con otras personas, tanto físicamente como por cualquier medio de comunicación".
Los niños no conocían ni a familiares ni a ninguna otra persona que no fueran sus padres y no salieron para nada al exterior, ni siquiera al jardín con el que contaba la vivienda, durante casi cuatro años "por el infundado temor que tenían los acusados, y que habían inculcado a sus hijos, a que se contagiasen de algo".
Los menores nunca fueron escolarizados en España por lo que los gemelos no sabían leer ni escribir, y tampoco tuvieron un seguimiento sanitario de su salud ya que la última vez que les llevaron al médico fue en 2019 y era los padres quienes les diagnosticaban y trataban los problemas cuando surgían. De hecho, en el interior de la llamada 'casa de los horrores' se encontraron abundantes medicamentos comprados sin receta.
Los niños presentaban igualmente problemas de control de esfínteres, ocasionados por la utilización indebida y prolongada de pañales, caminaban encorvados, con las piernas arqueadas, presentaban dificultades para subir y bajar escaleras, tenían la piel irritada y convivían entre "cantidades ingentes de basura y suciedad".
Como consecuencia de estos hechos, la Fiscalía mantiene que los menores sufren distocia social, que supondrá un retraso en la incorporación a las relaciones sociales propias de su edad.
Ante estos hechos, el ministerio público reclama para cada uno de los padres una pena de dos años y cuatro meses de prisión, así como la pérdida de la patria potestad y la prohibición de acercarse a sus hijos durante tres años y cuatro meses por el delito de violencia psíquica habitual.
Por cada delito de detención ilegal en concurso con otro de abandono de familia la Fiscalía reclama penas de : 7 años y 8 meses de prisión, inhabilitación para sufragio pasivo, y una prohibición de aproximación y comunicación con los menores durante 8 años y 6 meses, suspendiendo también cualquier régimen de visitas.
El matrimonio, que residía en una vivienda tipo chalet en la zona rural de Oviedo, fue arrestado tras la investigación abierta a raíz de una denuncia vecinal.
El Gobierno del Principado, que continúa buscando a familiares de los menores, se personará en la causa penal abierta contra sus padres al asumir la administración autonómica la tutela de los tres niños, publica EFE.
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