El hispanista británico publica una biografía de Franco en la que analiza también su impronta social y los tics que aún perduran hoy en día
Giles Tremlett: "¿Qué queda hoy en día del franquismo? El exceso de presidencialismo, el 'aquí mando yo'"
El hispanista británico publica una biografía de Franco en la que analiza también su impronta social y los tics que aún perduran hoy en día
El hispanista Giles Tremlett, que acaba de publicar una biografía sobre Franco, considera que el dictador logró moldear el país y que su huella sigue presente en la sociedad actual a través de un "franquismo sociológico" muy sutil que percibe, por ejemplo, en un "exceso de presidencialismo" en la política.
En el libro 'Franco. El dictador que moldeó un país', publicado coincidiendo con el 50 aniversario de la muerte del dictador, Tremlett analiza con detalle la vida de Francisco Franco y su impronta en la sociedad incluso años después de su fallecimiento.
Su intención, según explica en una entrevista con la Agencia EFE, es hacer un ejercicio "de empatía, que no de simpatía" para meterse en la cabeza de este personaje histórico, clave en la España del siglo XX, y "poder entenderlo y explicarlo mejor".
La "herencia franquista"
Su conclusión es que Franco "fue malo para España" y que, pese a tener un aspecto "mediocre" y no ser "un gran intelectual", logró moldear el país durante casi 40 años de dictadura (1939-1975) por medio de la educación, la religión, los medios de comunicación y leyes que discriminaban a las mujeres.
"El franquismo es más un proyecto de control social que un proyecto ideológico o político", dice el periodista y escritor británico, licenciado en Ciencias Humanas por la Universidad de Oxford y que se considera ante todo un hispanista.
En su opinión, Franco ejerció este control a través del miedo y la propaganda y fue capaz de imponer un "franquismo sociológico", visible también en la "apatía política" y en el "seguidismo" a su figura, y que sigue presente en la sociedad española, aunque es "difícil de medir".
"¿Qué queda hoy en día? lo que yo llamo un exceso de presidencialismo, este 'aquí mando yo', y el seguidismo al que manda", dice Tremlett, que cree que otras señales de este "franquismo sociológico" son la autocomplacencia y el machismo, aunque reconoce que no es algo exclusivo de la sociedad española.
Sobre la herencia que dejó Franco, opina que lo más concreto es la monarquía, que fue impuesta por él hasta el punto de que eligió como sucesor al rey Juan Carlos I en lugar de al padre de este, Juan de Borbón.
Una figura apenas conocida
Para Tremlett, uno de los rasgos más destacados de Franco y que más pueden sorprender al lector es que tenía "una autoestima altísima", aunque era "un hombre mediocre, bajito de estatura y con la voz aflautada", mientras que su gran cualidad fue su capacidad de mando, demostrada en su carrera militar y en la propia dictadura.
"Estaba pensando siempre en España como si fuera una entidad militar y en los españoles como sus soldados", comenta el escritor.
En su libro describe a Franco como un hombre frío y despiadado, pero cree que uno de los problemas de la sociedad española actual es que pocas personas saben cómo fue realmente, porque muchos de los que vivieron durante la dictadura y que ahora son mayores guardan un recuerdo positivo de los últimos años, con la apertura de España al exterior y el 'boom' económico.
En el caso de los jóvenes, el hispanista lamenta que han aprendido "bastante poco" en el colegio y el instituto sobre Franco y el franquismo, y señala que casi toda la información la han recibido a través de lo que les han transmitido sus padres y sus abuelos.
El "pacto de silencio"
Tremlett opina que la sociedad española tuvo parte de culpa en la permanencia del franquismo, ya que "apenas se rebeló", aunque reconoce que era difícil hacerlo porque Franco ejercía un "control absoluto" por medio de herramientas como el miedo, sobre todo en los primeros años.
"Buscaba un pueblo manso y un pueblo apático en lo político, y eso también en gran medida lo consiguió", dice.
En la Transición asegura que hubo "un pacto de silencio" sobre el franquismo que, en su opinión, estuvo motivado por la posibilidad de que hubiera un golpe de Estado, pero que duró demasiado tiempo "por una especie de inercia y miedo".
"El pacto de silencio podría haber durado 10 años y habría sido útil, pero luego ya no hacía falta. El problema es que duró 30 años. No fue hasta el siglo XXI cuando se empezaron a buscar a los fusilados que estaban enterrados al lado de las carreteras", indica.
Tremlett, que vive desde hace años en Madrid, recuerda cómo en los años 80 casi nadie hablaba de Franco en España, como si no hubiera existido o fuera una "vergüenza nacional", pero en la actualidad percibe "una suerte de simpatía" entre algunos sectores, y por eso considera importante dar a conocer la realidad, aunque sea tarde.
Científicos del instituto Max Planck hallan indicios de moléculas orgánicas complejas, precursoras de los aminoácidos, en un disco de formación planetaria
Ambas estarán en el palco del estadio de Basilea en el que se disputará el partido entre Inglaterra y España
Entre este miércoles y el viernes, la llegada de esos vientos de componente noroeste y norte arrastrarán una masa de aire frío para la época del año